Cántame suavito

La Voz

La voz entendida como vibración es el reflejo de nuestro ser, nuestra música, nuestro sonar, nuestro resonar, nuestra expresión más profunda.

El ser en su integridad es una vibración. Esta vibración se refleja en la respiración, el cuerpo y la voz.

Ampliando el registro sonoro de la voz ayudas a desarrollar la conciencia e integración del ser.

El Cuerpo de la Voz es un método físico-vocal que amplía el registro de nuestra voz, abriendo y uniendo todo el espectro sonoro o vibracional de nuestro ser, desde las frecuencias más rápidas y agudas hasta las frecuencias más lentas y graves. La voz integra estos dos polos uniendo espíritu, mente y cuerpo.

 

Para ello ha de haber una mirada, una reflexión sobre como habitamos nuestro cuerpo, como lo respiramos. La idea es llegar a estar presente desde la relajación. Proyectarse al exterior sin exceso de fuerza, con el empuje justo. Integrar voz y respiración hace que unas también respiración y gesto y a la vez respiración y pensamiento. La conciencia de la propia voz nos ayuda a integrar la escucha de nuestro interior y exterior simultáneamente.

 

En este método utilizamos también vocalizaciones y sonidos pre-verbales, sonido puro para entrar más fácilmente en el inconsciente. La imaginería se despierta en las improvisaciones y la cantas. El pensamiento asociativo se abre aquietando el espacio concreto de la palabra, El sonido y la vibración de la propia voz nos ayuda a entrar fácilmente en estados alterados de conciencia.

 

La voz y su movimiento corporal integrado invita a observar los mundos interiores que se abren. Y el cuerpo se libera, el canto se hace cuerpo.